El MINCIT ha presentado un proyecto de decreto que propone modificar el artículo 1º del Decreto 1881 de 2021, permitiendo un aumento de los aranceles entre un 10 % y un 20 % para vehículos, repuestos y llantas.
De acuerdo con la entidad, esta medida busca “fortalecer y proteger la industria automotriz colombiana y generar condiciones más favorables para atraer nuevas inversiones en la producción nacional”. El borrador del decreto establece que la decisión de incrementar los aranceles no requerirá aprobación previa del Comité de Asuntos Aduaneros, Arancelarios y de Comercio Exterior.
Así las cosas, entre los bienes afectados se incluyen llantas, frenos, unidades de refrigeración, camiones de más de cinco toneladas y otros componentes como vidrios, tornillos, pinturas y muelles helicoidales.
Posición de los Gremios:
Ante esta propuesta, gremios como Colfecar y Fedetranscarga han expresado su preocupación, señalando que esta decisión podría agravar la crisis en el sector transporte. Según Colfecar, “el sector enfrenta pérdidas por lucro cesante de $4,1 billones debido a cierres viales, bloqueos y fallas en la infraestructura”. Además, advierte que el aumento arancelario impactará los costos logísticos, ya que la industria colombiana depende en gran medida de insumos importados, que ya están gravados con un IVA del 19 %.
Por su parte, Fedetranscarga destacó que el impacto sería especialmente grave para los pequeños propietarios que no pueden asumir costos adicionales. Un ejemplo citado es el de una mini mula con un valor de importación de $400 millones, que, tras el incremento arancelario, costaría $480 millones, un 14,3 % más cara.
“El encarecimiento también afectaría el costo operativo del transporte, impactando el Índice de Costos del Transporte de Carga (ICTC), que actualmente representa el 13,31 % de los costos operativos según el DANE”, indicó el gremio.
Fuente: Analdex
Reformas fundamentales
Tarifas de acuerdo al impacto ambiental: Los automóviles que emiten más emisiones contaminantes tendrán tarifas más altas, mientras que los que utilizan tecnologías ecológicas y de cero emisiones tendrán impuestos más reducidos. Esto implica un incremento gradual en el volumen de autopartes y motopartes, en concordancia con los compromisos medioambientales del país.
Economía de diversificación: La regulación tiene como objetivo disminuir la dependencia de industrias extractivas como el petróleo y el carbón, fomentando una matriz de producción más variada e incentivando inversiones en la fabricación de vehículos y componentes sustentables.
Potenciación de la industria del país: El propósito del decreto es salvaguardar la industria automotriz de Colombia, promoviendo encadenamientos productivos y empleo de calidad. Esta integración favorecerá a sectores como la metalmecánica, electrónica y petroquímica.
Impacto en el mercado y los consumidores
La regulación contempla un aumento de hasta un 10% en los impuestos aduaneros de autopartes y motopartes, con incrementos extra en situaciones donde exista suficiente producción local para satisfacer la demanda nacional. Estas modificaciones serán evaluadas cada año para asegurar su eficacia.
Para los compradores, esta estrategia podría resultar en una amplia gama de vehículos con tecnologías ecológicas a costos más competitivos, motivando la adopción de coches eléctricos, híbridos y de bajas emisiones. No obstante, ciertos modelos convencionales podrían sufrir un aumento en sus precios.
Revisión y adaptabilidad de la normativa
El Comité de Asuntos Aduaneros, Arancelarios y de Comercio Exterior evaluará el efecto de la medida cada año para asegurar su eficacia. Estas valoraciones facilitarán la modificación de las tarifas y asegurarán el logro de los objetivos de la reforma, preservando el balance entre el progreso industrial y las obligaciones comerciales internacionales.
Sostenibilidad como eje de la política pública
Conforme a la transición energética impulsada por el Gobierno Nacional, esta política de tarifas simboliza un intento de conciliar las metas de reindustrialización con las obligaciones medioambientales. La implementación de tarifas aduaneras que promueven las tecnologías ecológicas tiene como objetivo disminuir las emisiones de carbono del sector automotor y establecer a Colombia como un referente regional en materia de sostenibilidad.
Un futuro competitivo y sostenible
Con este decreto, la industria automotriz de Colombia se dirige hacia un replanteamiento estratégico que lo convertirá en un sector más competitivo, sustentable e innovador. El triunfo de este cambio se basará en la cooperación entre el gobierno, las compañías y los consumidores para fortalecer una industria que produzca riqueza, promueva la inclusión y proteja el entorno natural.
Colombia posee la posibilidad de transformarse en un referente para América Latina en la aplicación de políticas que fusionen la sostenibilidad, la innovación y la competitividad en el sector industrial. El reto actual consiste en concretar esta visión en un futuro floreciente para todos los participantes del sector automotor y la economía del país.
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